DOBLE M: valiente.

Buenos días a todos y todas las que estáis por aquí. Hoy os quiero enseñar el primer paso en una idea que me iba rondando por la cabeza: fotografiar diferentes mujeres, con diferentes personalidades, rasgos y cuerpos demostrando que la belleza real no discrimina a nadie.

Quise unir todo eso con la moda y diferentes estilos para enseñaros un poco mis tendencias favoritas este Otoño-Invierno.

Para esta primera entrada decidí proponerle a tres de mis amigas la idea de por un día ser modelos de una sesión fotográfica –nivel bajo, adoro la fotografía pero aún no me he formado- en la que buscaba que se sintieran libres, sin complejos, que la actitud las inundara de arriba abajo y a través de la moda consiguieran salir de su zona de confort y ver un poquito más allá.

Mi idea es continuar al acabar el EIR con este proyecto y retratar la belleza que hay en cada una de nosotras, lograr sacarnos fuera de ese círculo que muchas veces trazamos influenciadas por la sociedad, los cánones de belleza, la experiencia personal o la falta de confianza que tenemos en nosotras mismas. Seguramente solo nos hace falta ese empujoncito, esa perspectiva que nos enseñe a romper con las limitaciones que nos imponemos cada día, que saque la magia que guardamos dentro.

Una de las mujeres de mi vida, cada vez que le cuento algo que llevo en mente me dice: “si puedes soñarlo puedes hacerlo” y no sabéis la fuerza que da saber que creen en ti. Gracias mamá por hacerlo siempre.

Empiezo por contaros un poco cómo lo hicimos.

Antes del shooting eché un vistazo a las nuevas tendencias y elegí cuál sería la línea de cada una. Definí su personalidad en tres rasgos clave y a través de ellos confeccioné tres looks diferentes para cada una de ellas.

La noche de antes y como descanso de tanto estudio organicé un poco el burro con los complementos que íbamos a utilizar, cargué la cámara y les mandé algunas fotos para que les sirvieran de inspiración –ninguna de ellas conocía sus looks hasta que llegaron a casa-. Al llegar les conté cómo íbamos a hacerlo, las maquillé y entre risas y muchísima actitud se convirtieron en la mismísima Mery Turiel.

Pese a llover como nunca lo había hecho conseguimos que parara un rato. El justo para subir a algunos de los sitios más característicos de nuestra ciudad y echar algunas fotos con el primer look.

Para este look escogí ropa cómoda jugando con los estampados de cuadros, tonos neutros y complementos clave que le dan al look algo diferente. Marcar la diferencia atreviéndote con un sombrero, un bolso de charol y zapatillas o ese cinturón que tenías guardado en el armario son siempre una buena decisión.

Se hizo prácticamente de noche y empezamos a tener algún problemilla con la luz. Nada que no pudiéramos solucionar. Escogimos una fachada blanca para la segunda tanda de fotos dando la claridad ya no nos facilitaba. Cada una de ellas tenía al menos un conjunto de ropa que yo sabía que no se pondría bajo ningún concepto. Quería que exploraran otros estilos y se dieran cuenta que no pasaba nada por probarse. Sé que algún día cuando se compren una boina roja me lo agradecerán.

En el segundo look, la comodidad se transformaba en elegancia a través de pendientes strass, cinturones con muchísima personalidad, estampados de serpiente y abrigos de pelo. Como pieza clave los complementos hacían de un look ordinario algo extraordinario.

En el tercer y último look se nos hizo de noche del todo por lo que tuvimos que improvisar sobre la marcha y crear nuevos escenarios. Escogimos los años 70 como pieza clave con la que jugar nuestras cartas y ¡no salió nada mal! De hecho, estas fotos son de mis favoritas. De nuevo los animalprint marcaron tendencia.

¡Y esto es todo por hoy!

Espero que hayáis disfrutado de las fotos tanto como nosotras haciéndolas. ¿Qué os han parecido? Dejadme vuestros comentarios por aquí o por Instagram. ¡Ya sabeis que MIMblog tiene cuenta! En ella compartimos muchos trucos, recomendaciones, promociones, etc.

Muchas gracias por estar aquí un día más. ¡Nos vemos muy pronto!